Como sabemos todos los que somos aficionados a la astronomía, nunca podemos estarnos quietos con nuestro equipo. Para potenciar la capacidad de trabajo del observatorio en los campos relacionados con cometas y asteroides he sustituido en el observatorio el tubo Celestron 8 por el Celestron 9.25 de fibra de carbono, que hasta ahora usaba para observación visual.
Este cambio mejora la cálidad óptica del equipo, y permite la captación de casi un 40% más de luz, asegurando una mejor relación s/r y una mejora tanto en la detección como en las medidas de cuerpos menores.
Próximamente actualizaré las fotografías de todos los equipos.